El enfoque de competencias entiende que el contexto social y económico actual es un escenario dinámico y globalizado que exige a los individuos desenvolverse en situaciones diversas e inciertas. Las competencias son una combinación de conocimientos, capacidades, destrezas, actitudes, valores, motivaciones y emociones orientadas al logro de capacidades finales y prácticas efectivas en los individuos que se adecuen a los diferentes contextos y situaciones vivenciales (DeSeCo, 2003). En el campo de la evaluación de programas y políticas el enfoque de competencias debe incorporar, además del conocimiento específico conceptual o de destrezas (“saber decir” o “saber hacer”), un conjunto de actitudes y valores (“saber ser”) e incluir la dimensión social (“aprender a convivir”). Además, estas cuatro dimensiones competenciales pueden ser diferentes en función del rol que se tenga en el proceso de evaluación (evaluador/a, comanditario/a, destinatario/a, …). Para abordar estas reflexiones se ha diseñado el XX seminario de experiencias de evaluación del Máster en Evaluación de Programas y Políticas Públicas.